El 4 de agosto de 2002, Todd Sees, un cazador de 39 años de Pensilvania, salió antes del amanecer para avistar ciervos en Montour Ridge, cerca de su casa en Point Township. Dijo a su esposa que regresaría al mediodía, pero nunca volvió. Horas después, su vehículo todo terreno fue encontrado a dos millas de su hogar, pero no había señales de Todd. A pesar de una intensa búsqueda que involucró a más de 200 voluntarios y perros rastreadores, Todd permaneció desaparecido.
Dos días después, su cuerpo fue encontrado en un área boscosa cercana, en un arbusto denso. Estaba parcialmente desnudo, con una expresión de terror en su rostro. La autopsia no reveló causas claras de muerte, y un informe de toxicología sugirió la presencia de cocaína en su sistema, aunque su familia y amigos niegan que él consumiera drogas.
Lo más desconcertante fueron los testimonios de testigos que afirmaron haber visto un objeto volador no identificado (OVNI) cerca de la zona donde Todd desapareció. Algunos sugieren que pudo haber sido abducido por extraterrestres, mientras que otros creen en una posible encubrimiento por parte de las autoridades.
Este caso ha generado numerosas teorías y especulaciones, convirtiéndose en uno de los misterios más intrigantes de la ufología moderna. A pesar de los esfuerzos por esclarecer los hechos, el caso de Todd Sees sigue sin resolverse, dejando más preguntas que respuestas.
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