En el emblemático Cerro de las Noas de Torreón se llevó a cabo la tradicional “Mega Reliquia”, un evento que trasciende lo religioso para convertirse en un símbolo de identidad lagunera mediante el reparto de asado rojo y cuatro tipos de sopa.
El obispo Luis Martín Barraza describió la celebración como un retrato del deseo de paz y hermandad de la comunidad, mientras que familias y cocineros locales, como el señor Ruperto, mantienen vivo este legado generacional, transformando la devoción a los santos en una fiesta de convivencia que reúne a chicos y grandes alrededor de este platillo único.
Recinto de la Revolución: Testigo histórico en el corazón de Gómez Palacio








