La Dirección de Bienestar Animal de Piedras Negras, Coahuila, se encuentra en el centro de la polémica tras la difusión de un video en redes sociales que muestra a su personal arrojando decenas de perros muertos en el basurero municipal.
Las imágenes, captadas presuntamente esta semana, desataron de indignación entre habitantes, activistas y asociaciones protectoras de animales, que calificaron los hechos como un acto de crueldad y negligencia institucional.
En el video se observa a empleados del área descargando los cuerpos desde camionetas oficiales, sin ningún tipo de manejo sanitario ni protocolo de disposición, en lo que parece haberse convertido en un “cementerio clandestino” de mascotas.
Vecinos denunciaron que el sitio desprende fuertes olores y que los restos fueron lanzados entre la basura común, evidenciando la falta de respeto y sensibilidad hacia los animales que el área debía proteger.
El responsable del área, MVZ Alfonso Orta González, volvió a estar bajo la lupa pública. Apenas semanas atrás había causado controversia al pedir a la ciudadanía que “no alimentara ni diera agua a los perros callejeros”, argumentando que eso los volvía “territoriales y agresivos”. Ahora, tras la difusión del video, sus declaraciones son vistas como un reflejo de una presunta política de abandono y sacrificio sistemático.
Orta reconoció anteriormente que el municipio enfrenta una sobrepoblación estimada de más de 35 mil perros callejeros, y admitió que no existen recursos ni espacio suficiente para atenderlos.
Sin embargo, activistas señalaron que eso no justifica los métodos utilizados y exigieron su destitución inmediata, junto con la del director de Ecología e Imagen Urbana, Alexis González, acusado de encubrir las omisiones del personal pese a múltiples denuncias ciudadanas.
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Ante la presión pública, el alcalde Jacobo Rodríguez emitió un comunicado en el que condenó “de manera enérgica y absoluta cualquier acto que vulnere la dignidad animal”, y aseguró haber instruido a la Contraloría Municipal para abrir una investigación inmediata.
En un mensaje posterior, el edil reconoció que el traslado de los cuerpos al relleno sanitario estaba contemplado dentro del plan municipal, aunque calificó de “grotesca” la forma en que fueron desechados.
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