En la Región Laguna, la tradición de ofrecer la reliquia al Santo de las Causas Difíciles ha sido un punto de encuentro para la comunidad y las familias creyentes cada 28 de octubre. Entre los ejemplos más emblemáticos se encuentra la familia Onofre Ramírez, que lleva 38 años manteniendo viva esta devoción.

“A mí esto me lo dejaron mis padres, que en paz descansen. Ellos me dijeron: agarra una devoción del santo que tú quieras, y entonces a mí él me ha hecho muchos milagros, gracias a Dios y a mi familia”, comentó Porfiria Ramírez, quien participa activamente en la preparación de la ofrenda.

El patriarca de la familia, Marcial Onofre, recordó uno de los milagros que le atribuye al santo: “Hace 18 años le pedí a San Juditas, y como a mí me gusta el trago, le dije: ‘si me la saco, te prometo un año sin tomar cerveza ni alcohol’. Y no, pues me la saqué, y aguanté el año… y 10 días”.

La preparación de la reliquia es todo un ritual que requiere dos días de trabajo intenso. Porfiria Ramírez relató cómo ha ido incrementando la cantidad de comida con los años: “Cuando empecé, eran tres cajas y el arroz nada más; ahora son doce cajas aparte del arroz”.

📲 ¡Síguenos en nuestro canal de difusión de WhatsApp! —> https://bit.ly/4dsc0TB

El platillo, con sazón original zacatecano, incluye cerca de 23 cazuelas de sopa y alrededor de 100 kilos de asado, elaborado con la ayuda de familiares y vecinos, quienes apoyan la tradición pese al incremento de costos este año.

DIF canaliza a niños de 8 años que mataron a un gato en Durango