“El nombre es mío, nadie me lo puede quitar”. Con esa frase contundente, el legendario luchador Octagón puso punto final a una de las controversias más largas en la historia reciente de la lucha libre. El ícono del pancracio confirmó este martes que ha ganado la prolongada batalla legal por la titularidad de su personaje, poniendo fin a años de incertidumbre y disputas legales.
¿Qué significa esta victoria para Octagón?
Este triunfo en los tribunales representa mucho más que un simple trámite. Para el “Amo de los Ocho Ángulos”, significa la reivindicación de su identidad como creador del personaje hace más de tres décadas. La resolución le otorga el control absoluto sobre el nombre, la máscara y el legado que forjó en el ring, un derecho que estuvo en disputa durante años.
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El conflicto por las versiones “Jr.”
El núcleo de la batalla legal fue el uso no autorizado de su personaje. Durante el conflicto, la empresa AAA (con quien mantuvo el litigio) presentó a su propia versión de “Octagón Jr.”, un luchador que no tenía relación alguna con el creador del personaje. Con esta nueva resolución, el Octagón original tiene ahora las herramientas legales para impedir que otras empresas o luchadores exploten su nombre sin su autorización expresa.
@estoenlinea Con evidencia en mano 📃 Octagón muestra los documentos que lo avalan ante INDAUTOR y presume que le ganó una marca en el IMPI a Triple A y va por más 🔥 #ESTO #LuchaLibre #Octagón ♬ sonido original - ESTO en línea
El futuro del legado de los 8 ángulos
Con el control total de su marca, Octagón es ahora el único que puede designar a un sucesor. Esto valida a su Hijo de Octagón como el portador legítimo de la máscara y anula cualquier otra versión que circule en el circuito. Esta victoria sienta un precedente crucial para otros luchadores en la defensa de la propiedad intelectual de sus personajes frente a las promotoras.
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